Se destaca la importancia de que todos, no solo los pacientes con lupus, se protejan adecuadamente de la exposición al sol para prevenir problemas de salud relacionados.
La radiación solar puede ser una causa desencadenante del lupus, una enfermedad autoinmune que afecta a múltiples sistemas del cuerpo. Junto con la predisposición genética, se han identificado otros factores desencadenantes, como las infecciones, los cambios hormonales y la exposición a la luz ultravioleta.
La Dra. Sagrario Bustabad, presidenta de la Sociedad Española de Reumatología, subraya la importancia de la fotoprotección en pacientes con lupus para prevenir brotes cutáneos y sistémicos.
En el marco del "Día Mundial del Lupus", la SER, en colaboración con la Federación Española de Lupus (FELUPUS) y GSK, ha lanzado una campaña de concienciación para aumentar la visibilidad de esta enfermedad autoinmune. Silvia Pérez, presidenta de FELUPUS, destaca la necesidad de mejorar el conocimiento sobre el lupus y garantizar una atención adecuada para los pacientes.
Es importante el uso del protector solar en pacientes con lupus, quienes tienen un alto riesgo de brotes cutáneos debido a la fotosensibilidad. Además se recomienda el uso de gorras, gafas de sol y crema de protección solar, y se aconseja evitar las cámaras de bronceado.
La radiación UV es lo que causa daño celular, independientemente de si proviene del sol o de una lámpara. Sin embargo, lo que ocurre después es lo que marca la diferencia.
En las personas con lupus, las células son mucho más sensibles al daño causado por la radiación UV, una vez que las células están afectadas, el sistema inmunitario las elimina, pero las personas con lupus tienen un aclaramiento mucho más lento de estas células.
Este retardo en la eliminación de las células dañadas conduce a la acumulación de células muertas en el cuerpo, desencadenando una respuesta autoinmune. Tenemos anticuerpos en nuestro sistema inmunitario que normalmente se utilizan para combatir las infecciones.
En las personas con lupus, la exposición a los rayos UV puede desencadenar no sólo el empeoramiento del lupus cutáneo y otros tipos de fotosensibilidad, sino también activar y empeorar los síntomas sistémicos, como el dolor articular y la enfermedad renal.
Si bien, la Reumatología es la especialidad primordial en el manejo de esta enfermedad, debido a sus características sistémicas, se necesita un enfoque multidisciplinario. "Gracias a la investigación, en los últimos años se han observado mejoras significativas en los tratamientos. No obstante, las personas que viven con lupus enfrentan desafíos en su día a día", destaca la doctora Bustabab, quien enfatiza la importancia de la protección solar debido a la alta fotosensibilidad asociada con esta condición.
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