La experta enfatiza en la necesidad de atender la dismenorrea en la población de mujeres.
El dolor intermenstrual aqueja a un vasto número de mujeres a nivel mundial, esto obedece a que el ovario para los días próximos a la menstruación (14 días antes) se encuentre en el proceso de ovulación, por ello el dolor se manifiesta generalmente en un mismo lado y puede prolongarse por varios meses.
La doctora Rosa Ileana Cruz Burgos, endocrinóloga reproductiva, explicó a Medicina y Salud Pública que al menos el 50 por ciento de las mujeres que acuden a citas especializadas argumentan haber experimentado dolores menstruales excesivamente dolorosos.
En este particular, indicó que ese mismo porcentaje (50 por ciento) sufren de trastornos menstruales padecen del síndrome de ovario poliquístico (SOP), el cual se caracteriza porque las mujeres tienen altos niveles de hormonas (andrógenos), lo cual impide la liberación de óvulos maduros.
Los pólipos uterinos que se forman alrededor de la matriz causan que las mujeres desarrollen con más intensidad, sangrado vaginal después de la menopausia, sangrado entre períodos menstruales y por ende sangrado menstrual irregular.
La especialista recalcó que el dolor intermenstrual aqueja notablemente a las mujeres que lo padecen, ya que es muy fuerte, debido a que se desarrolla en parte baja del abdomen, y se presenta mayormente en la mitad del ciclo menstrual, específicamente en los 14 días antes del siguiente periodo.
Sin embargo, es importante apuntar lo que refieren especialistas en el mundo, quienes indican que el dolor moderado por lo general es normal, pero cuando es severo e interrumpe la vida diaria es necesario consultar al especialista, porque puede ser causa de un trastorno más grave, como la endometriosis.
Es decir, el cuerpo da señales de dolor está indicando que algo no funciona bien y aunque la mujer se ha acostumbrado a normalizar el dolor de la menstruación, esa normalización ha llevado a sufrir desequilibrios de los que no se tienen consciencia, y a perpetuar enfermedades que no pueden seguir pasando desapercibidas.
¿Qué es la dismenorrea y cuáles son sus causas?
La Dra. Cruz Burgos precisó que la dismenorrea, al igual que el dolor menstrual, es aquel dolor uterino intenso que se caracteriza por los típicos calambres menstruales, los cuales se manifiestan de manera punzante en la parte inferior del abdomen.
Enfermedades como la endometriosis o los fibromas uterinos permiten que se desarrolle la dismenorrea, la cual es factible que se disminuya con el transcurrir de la edad, incluso después de dar a luz.
“Varios son los detonantes para identificar una dismenorrea crónica, entre los más frecuentes se encuentran aquellos síntomas que empeoran gradualmente. Para ello la mujer empieza a sentir cólicos menstruales intensos, sobre todo después de los 25 años”, expresó.
Otras de las causas que desencadenan la dismenorrea entre las mujeres se conocen el tabaquismo, el consumo de alcohol durante la menstruación, la obesidad o que hayan tenido su primera menstruación en edades muy tempranas, es decir antes de los 11 años.
“Este particular trastorno lo desencadenan otros factores incidentes como la endometriosis, fibromas uterinos, adenomiosis, enfermedad pélvica inflamatoria y la estenosis cervical”, informó.
¿Son los trastornos menstruales factores de alarma?
La especialista recalcó que los dolores intermenstruales o comúnmente llamados calambres no causan complicaciones médicas severas, pero si intervienen en la calidad de vida de las mujeres, sobre todo para ejecutar diversas tareas de índole cotidianas.
Algunos estudios han revelado en los últimos años que los trastornos menstruales aquejan en mayor medida a las adolescentes en edades próximas a los 20 años y a las mujeres en edad adulta entre los 30 y 40 años, ya que estas últimas los desarrollan con intensidad debido a la poca producción de hormonas.
Los dolores intermenstruales no tienen un medicamento definido para su cura, pero se recomiendan varias estrategias para disminuir su impacto en la vida de la mujer, como lo es una nutrición equilibrada, actividad física moderada y acudir a un especialista si estos síntomas son cada vez más dolorosos y frecuentes.
Según el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), una de las causales para que las mujeres se ausenten de sus estudios superiores y la oficina son los dolores fuertes o cólicos que experimentan durante su periodo de menstruación.
Lo anterior permite inferir que los dolores intermenstruales no están teniendo la demasiada atención que se merecen, ya que es una condición que aqueja notablemente a las mujeres y que en la mayoría de los casos no lo exteriorizan y lo sufren en silencio.
Lo primordial es que cada mujer conozca su cuerpo y su funcionamiento a través de sus ciclos menstruales, y que no se cohíba al comentarle al especialista de sentir un dolor intenso e insostenible que le afecte notablemente su calidad de vida.