El abuso sexual es un traición a la confianza del niño o niña, una herida física y psicológica que es difícil de curar
El abuso infantil es un tema de gran controversia debido a las serias repercusiones sociales y psicológicas que conlleva. La pedofilia, atracción sexual de adultos hacia niños, ha sido objeto de análisis y estudio en diversos contextos. Es importante abordar este problema y comprender cómo afecta el proceso de sanación de las víctimas, especialmente cuando se trata de abusos cometidos por personas en posiciones de poder.
Al respecto, el Dr. José Pons, especialista en neuropsicología y psicología forense, doctor en psicología clínica y expresidente de la Universidad Carlos Albizú, dedicada en Puerto Rico al tema de la salud mental, contó en exclusiva para la Revista Medicina y Salud Pública aspectos relevantes sobre la pedofilia y lo que afecta en el proceso de sanación de sus víctimas.
¿Existe diferencia entre pedofilia y pederastia?
El experto explicó que en Puerto Rico y Estados Unidos, no hay una diferencia muy marcada, de hecho, el concepto pederastia viene más de Sudamérica y España, ya que ambos refieren que es una atracción sexual de persona adulta hacia a un niño.
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Cabe aclarar, que la pedofilia no es considerada un delito, es decir, si esa atracción es controlada, ya que tiene que haber algún tipo de acto, que usualmente son bastante complejos.
A través del tiempo, se han identificado varios casos de abuso sexual por personas en puestos de poder tales como sacerdotes y profesores, los cuales utilizan su posición para realizar este tipo de actos.
"Yo quisiera pensar que eso ha disminuido, en cierta medida eso bastante prevalente, por lo menos en la cultura tradicional, donde todas estas personas en posiciones de poder sea a nivel religioso, salud o de otra índole, maestro y demás, en algunas ocasiones, algunas de estas personas con inclinaciones pedófilas, abusaron de su poder para involucrar niños en actividades de índole sexual", expresó el Dr. Pons.
¿Qué causa un abuso sexual?
El abuso sexual, es una violación profunda del espacio personal del niño o de la niña, es un traición a la confianza del niño o niña, una laceración que es difícil de curar. El hecho de que la persona pueda expresar esa experiencia, pueda evaluarla y verla desde la perspectiva de adulto, tiene un factor positivo.
Proceso de curación
Ahora bien, el experto enfatizó que si esa persona, se ha desarrollado intelectual, física y emocionalmente de modo relativamente sano, es especialista resalta que usualmente logran regresar a ese momento, de una manera modificada y menos traumatizante, la llamada reconsolidación de la memoria.
"Es una de las estrategias principales que utilizamos en psicoterapias, cuando le damos un espacio a las personas para que nos hablen de sus traumas, entre ellos, muy específicamente el trauma por abuso sexual", agregó.
A su vez, indicó que recibir validación y apoyo, es un componente importante del proceso de sanación, por ello, "una de las cosas que más afecta a la víctima, son comentarios tales como 'tú te lo buscaste', 'tú fuiste donde él', 'tú usaste el pantalón así', eso es devastador para un niño abusado, por eso, el que haya un apoyo social es beneficioso"
Según investigaciones previas, la edad crítica para el abuso sexual va de los 9 a 10 años, ciertamente, un abuso a cualquier edad, marca un impacto psicológico grave en cualquier víctima, sin embargo, en estas edades se evidencia un poco más de afectación.
¿Si hay consentimiento es considerado abuso?
Por otra parte, explicó que cuando un mayor de edad, se involucra con un menor de 14 o 15 años, desde el punto de vista psico-legal a pesar de haya cierto consentimiento, es considerado como pedofilia y violación,
"Es una niña que no tiene el desarrollo intelectual necesario para tener plena consciencia de las repercusiones del acto, no hay una identidad forjada como para saber si verdaderamente quiere entrar en el acto o no", señaló el psicólogo.
Traumas causados por el abuso
El experto resaltó que el método menos traumatizante para la víctima es el engaño, es decir, con palabras como que es un juego, que va junto a una amenaza, "pero no le digas nada a tu mamá porque se puede morir", ejemplificó el experto.
Ya que, con métodos que se relacionan con la violencia, causan un gran impacto psicológico al afectado, creando un trauma mayor.
Cabe señalar que en la mayoría de casos de abuso sexual, son perpetrados por personas cercanas, como vecinos, allegados de la familia o dentro del mismo núcleo familiar.
Por ello, algo que también influye bastante en la sanación y reducción del trauma del perjudicado, es el creerle a la víctima "si la madre le cree o no, por no perder el sustento en el hogar o no perder su compañero, cada una de estas cosas, sigue aumentando la probabilidad que esto sea un profundo y perdurable" lo que podría llevar a episodios de depresión profunda.
