Con la alta incidencia de enfermedades respiratorias en Puerto Rico, varias de las estrategias utilizadas en la pandemia por COVID-19 se siguen usando para la detección de casos.
A raíz de la pandemia, el Departamento de Salud de Puerto Rico ha venido experimentando una importante evolución en todo lo relacionado al rastreo, detección y tratamiento de las enfermedades infecciosas que se presenten en la isla.
De hecho, el Dr. Carlos Mellado, secretario del Departamento de Salud, reveló en exclusiva para la Revista Medicina y Salud Pública, que ahora la isla cuenta con más recursos económicos, un sistema de rastreo actualizado con el que se monitorea la actual epidemia de influenza.
"Hemos estado trabajando con lo que es la hepatitis C y un varios programas que vienen a consecuencia de la experiencia de haber tenido, por ejemplo, lugares para hacer pruebas a nivel masivos, servicarros, lugares en donde hacíamos la prueba y te suministrábamos el tratamiento si dabas positivo".
Dado el éxito de estas estrategias, esas iniciativas continúan aún, no solo con los casos de COVID, sino con condiciones de alta incidencia en Puerto Rico, como la hepatitis y algunos cánceres, para los cuales se implementa la medicina preventiva.
"De hecho ahora tenemos un programa que se llama ´Destino Salud´, en donde vamos a los municipios con especialistas, y parte del propósito que tiene todo esto es poder brindarle acceso a todos los pacientes que quizás no lo tuvieron y que siguen sin tenerlo por el reto geográfico que tienen".
Y es que la pandemia cambió muchas de las cosas a las que estábamos acostumbrados, una de las ventajas que esto trajo fue la telemedicina, que al día de hoy sigue ampliando el acceso al servicio de salud en lugares de difícil acceso.
Es importante resaltar que, si bien han pasado meses desde que la OMS decretó que el COVID-19 ya no se consideraba una emergencia de salud pública, aún se siguen reportando olas altas de contagio. Y esto se suma a la lista de enfermedades respiratorias que se presentan en la isla, como la influenza, el virus respiratorio sincitial.
"Todas estas condiciones van a prevalecer y nosotros vamos a seguir teniendo tratamiento disponible continuar las campañas educativas".
Ante esta situación, señaló que la estructura del Departamento de Salud tuvo que cambiar parte de su estructura para servir correctamente a la población, añadiendo recursos para la detección de estas enfermedades en laboratorios, tecnología, así como campañas de promoción y prevención de la salud.
"También todo lo que es enfermedades de transmisión sexual, COVID, influenza, hepatitis, dengue, Chikungunya que también son enfermedades que van a venir y nosotros las tenemos en nuestro sistema de vigilancia y velamos porque el sistema de laboratorio reporte esos resultados para nosotros poder educar la ciudadanía y atajar el problema temprano".
En múltiples ocasiones los médicos, independientemente de su especialidad, han referido que en Puerto Rico no hay suficientes especialistas para atender a la comunidad. Por ello, desde el Departamento de Salud se preparan estrategias que permitan a los profesionales de la salud en formación optar por quedarse en la isla, antes de decidir emigrar a Estados Unidos u otro país.
"Queremos aumentar residencias, queremos tener más cardiólogos, ginecólogos, internistas emergenciólogos, médicos de familia, y queremos mejorar los hospitales del Departamento de Salud, que ya se está haciendo y ya están acabando la fase, queremos aumentar la tarifa en los hospitales, queremos que más hospitales interesados en abrir residencias, todo eso es lo que queremos", expresó.
Aún así, señaló que estarán enfocados en aumentar la "partida de especialistas, reevaluar el sueldo que tienen las enfermeras. Sabemos que todavía hay mucho más por recorrer en esas áreas, trabajar con todos los proveedores. Sabemos que tenemos que mejorarlo y tenemos que seguir fiscalizando las aseguradoras".
Y como parte de ese plan de ampliación, expresó que los hospitales han recibido fondos para su ampliación.
"El Gobierno dio más de $543 millones de dólares a los hospitales. Ahora, el CDBG-DR/MIT tiene un dinero de $10 millones de dólares para cada hospital que lo solicite para infraestructura. Hay otro dinero para mejorar la red eléctrica y una cantidad de oportunidades que han surgido a partir de situaciones que son malas y que uno no quisiera y no quisiéramos que hubiera pasado para tener esto, pero ciertamente se está reestructurando el sistema de salud en Puerto Rico".
